Escándalo de Tesla: servidor cayendo y usuarios a pie. ¿Podría ser verdad?
Seamos realistas: Tesla, para bien o para mal, siempre habla de sí mismo, y hacer artículos que atraigan me gusta es muy simple, ¡solo menciónalo en el título!
El problema es que esto se hace solo con mala información y, a menudo, de forma maliciosa.
En estos días circula la noticia de que muchos usuarios de Tesla no habrían podido utilizar sus coches debido a una "caída" de los servidores que ejecutan la aplicación a través de los cuales se puede interactuar con el coche.
Me encontré con un montón de comentarios que rozan el ridículo, con personas que se erigen como expertos como un profesional electromecánico (que no tiene coche eléctrico) a pseudo concesionarios mecánicos "que los arreglan y hasta venden los coches" recibiendo en devolver las definiciones más bonitas como león cabecero, fan boy, etc., porque ya sabes, es más fácil leer el título y dar crédito a las creencias de uno que analizar las cosas con conocimiento de los hechos y, tal vez, conociéndolos realmente; me recuerda mucho a esa pequeña historia sobre las uvas amargas ... ¿recuerdas? el zorro y la uva? Bueno, sé tanto que muchos denigradores del mundo eléctrico en general y de Tesla en particular son protagonistas de esta historia.
Dejamos de lado a los "fan boys" y los obstinados independientemente y tratamos de poner la información en orden, para que sea correcta. Y si no te gusta la movilidad eléctrica por cualquier motivo, está bien, no es para todos y no necesariamente todos tienen que casarse con su lógica y filosofía. ¡Lo importante es que cada argumento se basa en algo sólido y no en las redes sociales y el entorno!
Hagamos una premisa: puede que a Tesla le guste o no, pero ha revolucionado el concepto de automóvil como siempre hemos estado acostumbrados a verlo. Podríamos definirlo como una tableta con ruedas alrededor, para exagerar la lógica, pero el ejemplo va bien con lo que es el entorno de Tesla. En los coches "tradicionales" para hacerte entender, una vez comprados se hace muy difícil actualizar los sistemas de seguridad o diversas funcionalidades porque implicaría reparaciones muy caras y no siempre factibles en el taller. Tesla, en cambio, permite todo esto con un simple clic y, a menudo, de forma gratuita con las actualizaciones periódicas que recibe el automóvil como si fuera un teléfono móvil o una PC. Por lo tanto, ocurre que las funciones no incluidas en el momento de la compra se implementan en absoluto sin aumentar los costos, o que las funciones bajo pedido se pueden activar incluso durante un tiempo predefinido simplemente "comprando" el servicio en línea o mediante la aplicación que controla de forma remota el automóvil. .
Con esta lógica, cada automóvil tiene su propia cuenta asociada a la aplicación Tesla y a través de esta el propietario puede interactuar con el automóvil encendiendo el aire acondicionado o la calefacción de forma remota, programándolo para que se encienda en ciertos momentos, verificar y ordenar la carga cuando esté conectado. , abre y cierra el coche de forma remota, permitiendo la conducción remota incluso sin llave y así sucesivamente con una serie de funciones que hacen que el uso del coche sea muy “inteligente”.
Los modelos 3 e Y nacen con una tarjeta RFID en lugar de la llave clásica, y esto permite abrir, cerrar y operar el coche como si fuera la llave clásica. Además existe la posibilidad, para facilitar a los usuarios, de hacer de su teléfono móvil la llave, de modo que solo necesitas tenerlo en el bolsillo y el coche reconoce al propietario sin hacer el "esfuerzo" de sacar la tarjeta RFID y apoyarse lo contra los rectos.
Claro que si dejo la tarjeta en casa, que como tal no pesa y no desordena, asumir que nunca habrá problemas con internet es un poco ingenuo, pero no puedo culpar a nadie más que a mí.!
Cuando falla un servidor, es decir, la aplicación no puede comunicarse con la sede para poder interactuar con el auto, como en el caso reportado por los medios, sucede que tienes que "luchar" para sacar la tarjeta de tu billetera, perdiendo 15 segundos , luego ponte en marcha y haz lo que quieras, como en cualquier otro coche. Eso sí, si hace frío, no se puede mandar a encender la calefacción de los asientos y el volante a distancia, por ejemplo, algo que no se puede hacer en casi ningún otro coche, incluso con servidores en funcionamiento, pero esto sí. No quiere decir que la noticia sea de esperarse. ¡Primera página!
Aquí, lo que sucedió es exactamente esto, no fue posible interactuar con el automóvil de forma remota, ¡eso es todo! Podemos compararlo con tener un teléfono móvil que en ese momento no tiene campo ni cobertura de internet por ejemplo; todo funciona igual excepto la conexión a internet, que no es esencial para el funcionamiento del coche. Y si pretendes usar el coche sin ni siquiera la llave, diría que no podemos culpar a nadie excepto a nosotros mismos por la excesiva confianza en que las cosas siempre van bien. No hay un mando a distancia estilo hermano mayor o quién sabe qué magos ovni. Los autos Tesla siempre están conectados, pero si por casualidad se salta la cobertura, como túneles, cruces fronterizos o similares, lo peor que puede pasar es no tener el navegador actualizado con tráfico en tiempo real o un poco más! Por lo tanto, todos los partidarios de las uvas amargas podrían al menos cuestionar, con argumentos serios, sus creencias y conocimientos antes de disparar a cero porque "ammio cuggggino en facebook dijo que ..."
Siempre hay algo que aprender, y yo soy el primero en querer siempre comparaciones constructivas, pero "no hay más sordos que los que no quieren oír" es una gran verdad. Lamentablemente, en la era de las redes sociales tan extendidas, todo el mundo tiene derecho a hablar, y Dios no lo quiera, pero muchas veces perdemos de vista que la información correcta es fundamental en todos los campos para los que debe ser necesario verificar las fuentes y sobre todo el conocimiento. la base de toda discusión constructiva, que no puede ni sucederá nunca cuando los argumentos en el campo son arrogancia, soberbia, agresión y… ¡envidia!
Marco Mazzocco
